Ain't no kindness in the face of strangers?

Y por fin tengo internet en mi casa, residencia, habitación. Por fin puedo dedicarme a escribir estos desvaríos directamente en la página del blog y no tengo q cortar y pegar desde word y por fin puedo abrir un nuevo espacio del mesenger, completamente vacío de momento, pero donde iré poniendo fotos varias de mis aventuras por aquí para que veais a los energúmenos que tengo por amigos (a los que por cierto adoro).

Si la semana pasada fue de locura y destrucción (salir 7 días de 7 no puede ser sano), esta semana estamos compensando, y estamos más de relax, de noches de películas y marujeo y confesiones y juegos frikis hasta altas horas de la madrugada. Hoy, jueves, ni siquiera toca salir por la noche, y eso que hay fiesta Erasmus, porque esta tarde nos sorprendieron al salir de clase unas cañas improvisadas con unos amigos franceses y la borrachera a las 8 de la tarde nos quitó las ganas de más juerga... estamos hechas unas abuelas.

Por lo demás ya me encuentro completamente situada, me da la impresión de que llevo aquí media vida y que conozco a esta gente desde hace años. Los vínculos en estas situaciones son mucho más fuertes, en apenas un mes nos hemos contado todos a todos nuestras vidas. Hemos hablado de novios, amores, rollos, polvos ocasionales, amigos, historias varias, batallas...

Otra novedad: me he teñido el pelo de violeta en un arrebato de locura (tranquilos todos, no me lo he decolorado). En cuanto las recupere publicaré por aquí fotos del proceso y del resultado, a ver que os parece.

Que más contaros... hoy tengo el encefalogrma un poco plano, mañana tengo clase de derecho y economía del cine y tengo q ir a clase a escuchar por enésima vez lo maravilloso que es el cine francés y lo maravillosos que son los franceses por haber inventado el cine. No me quejo, porque por primera vez en cuatro años de carrera me hablan de cosas un poco interesantes. Desde luego es más entretenido estudiar economía del cine francés que estudiar la economía que "estudiábamos" con KarLolo.

Gran noticia: Ya tengo mi primera asignatura aprobada!!!!!! Bueno, realmente es la mitad de una asignatura, porque la otra parte es teórica y tendremos que hacer examen. El caso es que las cinco españolitas de la Complutense hemos tenido que exponer un trabajo en clase, obviamente en francés, hablando sobre los efectos de los medios de comunicación en el espectador. No era especialmente complicado, pero claro, lo del idioma dificulta las cosas. Por si fuera poco debíamos generar un debate en clase sobre el tema que habíamos explicado, así que acabamos discutiendo con los franceses acerca del 11-M, las elecciones, ZP, ETA, el Frente Popular, la Guerra Civil y todo lo os podais imaginar..... Al profesor (que debe tener como mucho 4 años más que yo), le debimos dar un poco de pena, porque nos dijo q lo habiamos hecho muy bien y nos puso un 14 sobre 20..... No está mal para ser la primera nota que me ponen los franceses, no???? A ver si se portan así de bien todos los demás profesores.....

La exposición nos sirvió además para hacer unos cuantos amigos que, además de dejarnos los apuntes en un futuro no muy lejano, nos informan de todos los eventos culturales de la ciudad. Así da gusto!!!!! Mañana toca ir a ver un espectáculo de danza contemporánea y nos sacaremos el abono del teatro, porque otra cosa no, pero las actividades culturales son baratísimas para los estudiantes, así que no me quejo.

Viajes de momento no he hecho demasiados: Algún día tocará hacer escapadita por la zona, o ir hasta Calais a ver el mar. Hay muchos planes propuestos pero aun no se sabe cuáles saldrán adelante: Amsterdam? Estocolmo? Londres? Roma?.........On vera!

De momento a aprovechar las fiestas por aquí, que son muchas, y a disfrutar de los últimos días de no frío que quedan, que ya deben ser pocos.

Mientras tanto, desde casa me llegan noticias de conciertos en los que no puedo estar, y mientras la envidia me corroe escucho a Bruce cantar sólo para mi (aunque nunc será lo mismo que verle en las Ventas).

"You can hide `neath your covers

and study your pain

make crosses from your lovers

throw roses in the rain"

(y yo tan lejos......)

Bicos para todos (pero bicos gallegos, no bicos portugueses).

Noche Blanca

Casi un mes ya en Lille. El tiempo va pasando a toda velocidad mientras yo empiezo a sentir que realmente vivo aquí. Ya está casi todo el papeleo solucionado (sólo falta el acuerdo de estudios de la universidad, detalles…)
Hoy, como todos los domingos de mi vida, día de melancolía, de morriña, de un poco de soledad y otro poco de compañía. Ayer, un sábado atípico. Un tren (siempre un tren) y un viaje improvisado a París. Una tarde paseando por Montmatre (mientras Raúl cantaba una y otra vez la Complainte de la Butte) y una noche mágica paseando por la ciudad.
Noche Blanca en París, danza en el Louvre, la Victoria de Samotracia que sigue siendo tan majestuosa y maravillosa como la primera vez que la vi al subir esa escalinata, hace ya unos cuantos años. La veo y se me vuelve a poner la piel de gallina, y recuerdo todas las veces que estuve antes en París, y toda la gente con la que estuve, y algunos que nunca vinieron.
Música en la calle, encuentros inesperados con gente de la facultad, un paseo por las Tullerías a las 12 de la noche y otro por el Sena de madrugada, el Pompidou, en el que nunca había entrado, pero que el sueño me impidió disfrutar (habrá que volver). A partir de las 4 de la mañana la noche se convirtió en un paseo errante por la ciudad, una iglesia en la que tomarnos un café al abrigo del frío y en la que jugar con pompas de jabón como si fuésemos de nuevo niños pequeños.
Al regreso, caras de cansancio, canciones de Sabina en el mp3 y la sensación de haber vivido una noche mágica pero que no supimos aprovechar bien, porque íbamos de turistas y sin saber dónde y a qué horas estaban los buenos espectáculos. De todas formas, pasar una noche en París siempre merece el viaje, el sueño y lo que haga falta.
Paseos por las calles de la ciudad con gente a la que a penas conozco, contándonos unos a otros nuestras penas, nuestra vida, nuestros pestrucheos pasados y presentes, la morriña, las ganas de ir a París con la persona adecuada y el típico tópico de que alguien nos bese en el Pont Neuf o frente al Hôtel de Ville (aunque la foto de Doisneau estuviese preparada).
Sigue siendo igual de maravillosa que siempre.

PD: en una semana espero tener internet en la habitación.